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28 de marzo de 2024
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Felisa Miceli por ahora zafó
"Está totalmente ratificada en su cargo", dijo el jefe de Gabinete. Y el presidente Kirchner la dejó viajar al acto de Tucumán. Igual, la Justicia sigue investigando la bolsa de dinero
9 de julio de 2007
Pese a estar en el ojo de la tormenta, la ministra de Economía, Felisa Miceli logró un fuerte respaldo del Gobierno.

Fue a través del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, al cabo de un agitado domingo.

"El Gobierno nacional se dio por satisfecho con las explicaciones que dio la ministra. Con esto descartamos todos los rumores", dijo Fernández a Clarín.

Los rumores que circularon durante la jornada fueron que Miceli estaba con un pie afuera del Gabinete y que el presidente Néstor Kirchner le había reclamado "un gesto". A esta altura del partido, "el gesto" no sería otro que presentar la renuncia.

Sin embargo, el jefe de Gabinete ratificó el respaldo del Presidente a la ministra. Luego de varias apariciones públicas que no despejaron mucho las dudas, Miceli ayer optó por un prudencial "silencio de radio", aunque sus voceros confirmaron un dato clave: la ministra se mostraría este lunes junto al presidente Kirchner en los actos por el día de la Independencia.

La ministra de Economía pasó súbitamente a la primera plana de los diarios luego de que se revelara públicamente el misterioso hallazgo de una importante suma de dinero escondida en el placard del baño de su despacho (ver "La bolsa...").

Pero fueron, justamente, sus explicaciones públicas las que más dudas generaron luego de conocida la noticia.

"Me parece que hubo ingenuidad, torpeza de mi parte. Fue un error. Pudo haber negligencia, pero estoy segura de que no he cometido ningún delito", dijo Miceli.

Luego del reportaje, la ministra fue visitada por el fiscal Guillermo Marijuan, que encabezó en su despacho una inspección ocular para recabar pruebas. El fiscal abrió una investigación a pedido de un abogado particular que denunció el hecho. La jueza María Servini de Cubría delegó en él la pesquisa.

Luego de la recolección de pruebas, el paso lógico, si hay sospechas sobre el accionar de la ministra, sería el llamado a declaración indagatoria, cuando quedaría formalmente imputada de haber cometido un delito. Ese paso fue el límite que tuvo el Gobierno para deshacerse de dos funcionarios involucrados en la causa Skanska.

El escándalo Skanska sacudió al Gobierno en plena campaña electoral porteña. Pero la campaña siguió: el Gobierno anunció una semana después que Cristina Fernández será la candidata oficialista en la elección presidencial de octubre.