La selección sudamericana, que disputaba la séptima final de su historia, cinco de ellas en los últimos 12 años, no pudo contar con tres jugadores fundamentales por línea: el defensor y capitán Matías Cahaís, el volante Claudio Yacob, ambos suspendidos por doble amarilla, y el delantero Angel Di María, con tres goles en el
certamen, lesionado.

Argentina sufrió por sus ausencias, pero pudo sacar adelante un partido que empezó perdiendo y dio vuelta con un remate cruzado de Zárate, tras tiro de esquina.

Desacoples defensivos, especialmente por el sector de Leonardo Sigali, que no había jugado antes en el torneo, y sin el traslado efectivo de balón que tuvo en sus anteriores presentaciones, sus intenciones se resumían en esporádicos arrebatos individuales de Sergio Ag�ero, cuando lograba escapar de la marca checa, y
Maximiliano Moralez.

Los checos, que nunca habían accedido al partido decisivo en esta categoría, dieron una pequeña muestra de su receta antes del minuto de juego cuando Lukas Kuban fue con la plancha contra el lateral Gabriel Mercado y vio la amarilla. Los argentinos entraron en el juego y así transitó el primer tiempo, cortado por tantas
infracciones y cinco amonestados.

Los europeos llegaron primero a los 10 minutos. Tras un tiro libre desde la izquierda, Ondrej Kudela tocó y pegó en el palo. El rebote le quedó al defensor Marek Suchy, que parado en el tiro de penal tenía el gol servido, pero de milagro salvó Sergio Romero.

Argentina apareció a los 22 cuando el lateral Emiliano Insúa metió el pase en profundidad para Maximiliano Moralez. El veloz volante se escurrió por el sector derecho, metió el amague y la tocó para el gol de Ag�ero, pero éste molestado por un rival la pateó afuera.

Ya en el complemento los checos se encontraron con la ventaja cuando el volante Lubos Kalouda la retuvo entre varios defensores argentinos y vio el hueco en le área para Fenin, que la paró de pecho y la calzó de media vuelta al palo más lejano de Romero.

Embriagados por el festejo, los checos perdieron la concentración y dos minutos después Ever Banega se la tocó a Ag�ero, que por primera vez en el partido recibió libre, encaró al área y la tocó suave de derecha ante la salida del arquero. Fue el
sexto gol del ``Kun'', que lo hacen ganador del premio ``Botín de Oro'' al máximo artillero del certamen.

El fantasma de tiempo extra empezó a rondar por el estadio. Pero a cuatro del final, en un tiro de esquina Moralez tocó corto para Zárate, que de la nada sacó el zurdazo cruzado que le dio el título a su país.

Con esta nueva copa, Argentina amplía a dos la ventaja de títulos sobre su archirival Brasil, el segundo equipo más ganador de la categoría, y ratificó la supremacía del fútbol sudamericano a nivel juveniles sobre Europa, que recibió el trofeo por última vez en 1999.

Sudamérica tiene ahora 10 copas, contra seis del Viejo Continente en 15 ediciones. Fuera de ambas confederaciones, ninguna otra ganó un mundial Sub20.

Alineaciones:

REP. CHECA: Radek Petr, Ondrej Mazuch, Jan Simunek, Marek Zuchi, Lukas Kuban, Ondrej Kudela, Jakub Mares (Gecov 76), Tomas Micola, Lubos Kalouda, Marek Strestik (Pekhart, 82), Martin Fenin.

ARGENTINA: Sergio Romero, Gabriel Mercado, Federico Fazio, Leonardo Sigali, Emiliano Insúa, Matías Sánchez, Ever Banega, Pablo Piatti (Acosta, 79), Maximiliano Moralez (Cabral, 90), Sergio Ag�ero, Mauro Zárate.

Arbitro: Alberto Undiano Mallenco (España)