Si algo faltaba para "redondear" la pasión futbolera que invade por estos días a los argentinos, era la consumación de un hecho realmente insólito como el que se vio en esta ciudad: el área de Espacios Verdes de la Municipalidad plantó un árbol en homenaje al segundo gol que Diego Maradona le hizo a los ingleses, durante el Mundial de fútbol que se disputó en 1986, en México, y que ganó la Argentina.

La primera sorpresa llegó cuando, en la plazoleta que rodea al Concejo Deliberante, desembarcó una nutrida delegación de técnicos y operarios del municipio que comenzaron a remover un espacio de tierra del lugar.

Luego, sobrevino el asombro indescriptible cuando el responsable de Espacios Verdes, Hernán Ferrario, confirmó que se procedía a la ubicación de un joven algarrobo para recordar el inolvidable segundo gol de Maradona al seleccionado inglés, en oportunidad de cumplirse justamente ayer los 20 años de aquel suceso deportivo gigante para el fútbol mundial.

No está de más recordar que la magistral jugada de uno de los mejores momentos deportivos de Diego, duró 14 segundos, arrancó en campo argentino promediando el primer tiempo, y luego de eludir a seis jugadores británicos en un recorrido de 55 metros, depositó con un toque suave la pelota en el fondo de la red. Unos minutos antes, había convertido otro gol para la historia, el polémico "de la mano de Dios", como lo definió entonces el mismo Maradona.

Por las dudas se le consultó al funcionario comunal si el homenaje era, efectivamente, por el segundo gol. "Si, si, es un sencillo reconocimiento a una jugada increíble, que perdurará siempre, el otro fue valioso, pero es el de la polémica", aclara Ferrario, más como hincha que como funcionario.

El funcionario municipal a cargo del operativo, ensayó que "la medida es para festejar y recordar uno de los goles más lindos de la historia del fútbol. Fue un hecho que todos los argentinos recordamos con mucha felicidad, y plantar un árbol a 20 años de aquel hito, es un pequeño aporte a mantener viva una fecha sentida por todos".

La insólita medida municipal se concretó en un sector de la plazoleta del Concejo, muy cerca del monumento a los desaparecidos por la última dictadura.