El entrenador de Alemania, Juergen Klinsmann, se mostró entusiasmado tras la victoria ante Suceia 2-0 por los octavos de final y mirando a futuro señaló: "Que vengan los argentinos, que no les tenemos miedo".

Así desafió Klinsmann a los sudamericanos, rebosante de confianza. "Estamos en condiciones de llegar a semifinales y a la final".

"Todavía nos queda mucho trabajo por delante, pero nos estamos divirtiendo", dijo el técnico en entrevista con la televisión alemana, tras derrotar por 2-0 a Suecia en Múnich en los octavos de final del Mundial.

"La final todavía está lejos", añadió. "Pero estamos en forma. Podemos mantener un alto ritmo de partido".

Más allá del aspecto deportivo, Klinsmann destacó la importancia del estado anímico del plantel como clave del éxito: "Lo más importante es la fe, los jugadores creen en lo que hacen y por eso llega el éxito", explicó el seleccionador, quien se había fijado como meta mínima llegar a semifinales.