Como durante las últimas dos semanas, las líneas B y E comenzaron el día con demoras, según precisó Metrovías.

Los inconvenientes se producen en medio de un cruce de acusaciones entre la empresa y los delegados gremiales.

La compañía insiste con denuncias de sabotaje y los gremialistas aseguran que los trastornos en el servicio se producen porque las formaciones se encuentran en mal estado.

En este contexto, la empresa pidió el desafuero del delegado Néstor Segovia para poder despedirlo.

Mientras los pasajeros siguen sufriendo demoras, técnicos de la Secretaría de Transporte aseguran que los subtes están en condiciones de funcionar y el Ente Regulador de Servicios Públicos de la Ciudad de Buenos Aires advierte que ese servicio público presenta graves fallas.