El juicio por las "narcovalijas", el cargamento de 60 kilos de cocaína desbaratado en 2004 en un vuelo de la empresa Southern Winds con destino a España, comenzó este martes en los tribunales federales de Retiro, después de una larga demora por problemas operativos en el traslado de los detenidos.

En el juicio hay ocho acusados que, según sus abogados defensores, no son los únicos responsables del caso.

Aún antes de comenzar las audiencias, quedó en claro que la estrategia de las defensa, al menos de las de cuatro ex empleados de la empresa aérea, será sugerir que hay más implicados, y de mayor responsabilidad, en el caso.

Si bien el Tribunal Oral en lo Penal Económico tenía previsto iniciar temprano la larga lectura de la acusación fiscal contra los ocho imputados, sólo sobre el mediodía fue posible iniciar la audiencia.

Sin embargo, al llegar al edificio de Retiro, Ricardo Russian, el abogado de Walter Beltrame, ex empleado de la Southern Winds imputado en la causa, denunció un "embarre de cancha para que no se sepa la verdad" y estimó que debe "apuntarse a los responsables de la empresa".

Russian, en diálgo con la prensa antes de iniciarse el juicio oral, sostuvo que "era una modalidad" el envío de valijas sin dueño, por parte de Southern WINDS, y que "fueron muchas" las que se enviaron de esa forma a España, en donde se descubrieron cuatro con 60 kilos de cocaína.

Esa apreciación, que será repetida por otros defensores durante el juicio -según anunciaron fuentes vinculadas al caso- apunta a explicar que una maniobra como la investigada no habría podido llevarse a cabo sin, al menos, conocimiento de autoridades de la empresa y de seguridad aduanera y aeroportuaria.

"Con la detención de cuatro empleados no queda dilucidado" el caso, advirtió. El Tribunal Oral Penal Económico 3, integrado por los jueces Jorge Pisarenco, Luis Imas y Enrique Schlegel, con la intervención del fiscal Jorge Pezzano Rava, tiene previsto celebrar tres audiencias semanales a lo largo de dos meses para resolver luego.

Los principales imputados son los ex empleados de Southern Winds Walter Beltrame, ex encargado de atención a pasajeros frecuentes; Claudio Baudino, ex supervisor de tráfico; Fernando Arriete, ex gerente de ventas, y Ariel Tamburrini, ex jefe de base de la aerolínea en Madrid. A ellos se suman Elena Toimil Batán y José Ramón González Villar, ambos españoles y supuestos destinatarios de las valijas con la cocaína.

La nómmina de imputados se completa con Guillermo Sardi, acusado de ser el nexo con los españoles, y el remisero colombiano Juan David Aristizábal Tabares, sospechado de haber transportado una de las valijas con el alcaloide.