El Gobierno mejoró el cálculo de la jubilación estatal que cobrarán los trabajadores activos que están próximos a retirarse. Lo hizo a través de un decreto que estableció ajustes que oscilan entre 41,1% y 55,2%, según el monto del haber futuro.

La norma, que reglamentó el último aumento del 12,5% en las jubilaciones, especifica en su artículo 1 que los aumentos otorgados después de 2004 también beneficiarán a los trabajadores activos que se jubilen después del 1º de setiembre de 2007.

Esto significa que el haber inicial que paga el Estado -tanto para los afiliados a la ANSeS como para los afiliados a las AFJP- tendrá los mismos aumentos generales (hasta ahora fueron cuatro: del 10%, del 11%, del 13% y del 12,5%) otorgados desde 2004 a los ya jubilados. Eso da un aumento acumulado que oscila entre el 41,1% y el 55,2%.

La medida oficial apunta, entre otras cosas, a corregir una anomalía que venía desde 1994, cuando se sancionó la reforma previsional y que empezó a tomar importancia con la reaparición de la inflación.

Por la reforma jubilatoria de 1994, para el cálculo del haber estatal hay que tomar en cuenta el sueldo promedio "actualizado" de los últimos 10 años. Pero esa actualización nunca fue reglamentada. Entonces al computar el sueldo de los últimos 10 años, sin ningún ajuste por la inflación o la variación salarial, el haber jubilatorio quedaba licuado por la suba de los precios.