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Tratamiento de la leucemia linfocítica crónica
19 de noviembre de 2009
La Administración Nacional de Medicamentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó el uso de rituximab (nombre comercial MabThera®), en asociación con quimioterapia, para los pacientes con leucemia linfocítica crónica (LLC) que no han sido tratados previamente.

La aprobación de rituximab se basa en los resultados del estudio principal de fase III CLL8, el más importante realizado hasta la fecha en pacientes con esta patología. Estos resultados presentados en diciembre de 2008, en el Congreso Americano de Hematología, mostraron que los pacientes que habían recibido rituximab, en asociación con quimioterapia como tratamiento de primera línea, vivían en promedio 42 meses sin progresión del cáncer, frente a una media de 32 meses del grupo tratado con quimioterapia sola.

Es decir, los pacientes tratados con rituximab vivían más tiempo sin progresión de la enfermedad y teniendo que acudir con menor frecuencia al hospital.

Rituximab es un anticuerpo terapéutico que se une a una proteína específica, el antígeno CD20, en la superficie de las células (linfocitos) B normales y malignas, induciendo por diferentes mecanismos a la destrucción de las células malignas, permitiendo que las células B sanas puedan regenerarse después del tratamiento y alcanzar concentraciones normales en el espacio de algunos meses.

En la actualidad, la leucemia linfocítica crónica sigue siendo considerada como una enfermedad incurable, de modo que el objetivo del tratamiento consiste en controlarla actuando sobre los síntomas, prolongar la remisión y por tanto la vida de los pacientes retrasando la progresión de la enfermedad.

La LLC es el tipo más frecuente de leucemia en las personas adultas y representa el 30-40% de todas las formas de leucemia en los países occidentales.

La LLC tiene una incidencia mundial de aproximadamente tres casos por cada 100.0003 habitantes y su frecuencia es un 30% mayor en los hombres que en las mujeres2, afectando sobre todo a las personas mayores: el 70-80% de los pacientes diagnosticados tienen más de 55 años, y la mediana de edad al diagnóstico es alrededor de los 72 años.

Acerca del estudio CCL8
CLL8 es un ensayo clínico internacional, aleatorio, que se realizó en 191 centros de 11 países y en el que participaron 817 pacientes con LLC en tratamiento de primera línea. En el estudio, los pacientes recibieron rituximab en asociación con quimioterapia (fludarabina y ciclofosfamida) o quimioterapia sola. La variable principal de valoración fue la supervivencia sin progresión de la enfermedad. No se observaron signos de toxicidad nuevos o inesperados.

Rituximab es un anticuerpo terapéutico que se une a una proteína específica, el antígeno CD20, en la superficie de las células (linfocitos) B normales y malignas. Tras la unión, se movilizan las defensas naturales del organismo para destruir las células B marcadas. Dado que las células madre - progenitoras de las células B - de la médula ósea no tienen antígeno CD20, las células B sanas pueden regenerarse después del tratamiento y alcanzar concentraciones normales en el espacio de algunos meses.

Aparte de la indicación en primera línea para pacientes con leucemia linfocítica crónica en combinación con quimioterapia, rituximab está indicado:
• en asociación con quimioterapia, para el tratamiento de pacientes no pre-tratados con linfoma folicular en estadio III-IV;
• como tratamiento de mantenimiento de los linfomas foliculares en recidiva o refractarios que respondan a la terapia de inducción con quimioterapia con o sin rituximab;
• en asociación con la quimioterapia CHOP (ciclofosfamida, doxorubicina, vincristina y prednisona), para el tratamiento de los linfomas no hodgkinianos difusos de células B grandes, CD20 positivas;
• en monoterapia, para el tratamiento de los linfomas foliculares en estadio III-IV quimiorresistentes o en segunda o ulterior recidiva tras quimioterapia.

En reumatología, rituximab en asociación con metotrexato está indicado para el tratamiento de los pacientes adultos con artritis reumatoidea activa grave que no han respondido adecuadamente a otros fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (DMARDs).