Reconociendo la necesidad creciente de medicamentos que favorezcan el mejor funcionamiento cardiometabólico, el laboratorio de capitales nacionales SAVANT, presenta Carvedilol de 25 mg (Cartiato®) indicado para el tratamiento de insuficiencia cardíaca e hipertensión arterial.

Al actuar como vasodilatador, reduce la frecuencia cardiaca mejorando así, el flujo sanguíneo y la presión arterial. El Carvedilol, pertenece al grupo de beta-bloqueadores con mayor rango de acción y respuesta por parte del paciente con afecciones cardiovasculares y aquellos que presenten diabetes y hayan sufrido infarto de miocardio.

De igual manera, está disponible la Atorvastatina de 10 y 20 mg (Lipend®) que hace parte de las estatinas vinculadas a tratamiento de dislipidemia (hipertrigliceridemia e hipercolesterolemia) y la prevención de enfermedades cardiovasculares.

También contribuye a estabilizar las plaquetas y previene la embolia a través de mecanismos antinflamatorios. Con estos medicamentos, Savant busca contribuir a la mejoría de pacientes con patologías cardiovasculares, las cuales son consideradas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como factor de riesgo de muerte o discapacidad por las enfermedades asociadas, que pueden prevenirse a través de buenos hábitos de vida y/o con apoyo farmacológico.

Datos y cifras de interés:
Las Enfermedades Cardiovasculares (ECV) son la principal causa de muerte en todo el mundo. Cada año mueren más personas por ECV que por cualquier otra causa.

Se calcula que en 2008 murieron por esta causa 17,3 millones de personas, lo cual representa un 30% de todas las muertes registradas en el mundo; 7,3 millones de esas muertes se debieron a la cardiopatía coronaria, y 6,2 millones a los AVC.

Las muertes por ECV afectan por igual a ambos sexos, y más del 80% se producen en países de ingresos bajos y medios. Se calcula que en 2030 morirán cerca de 23,3 millones de personas por ECV, sobre todo por cardiopatías y AVC, y se prevé que sigan siendo la principal causa de muerte.

La mayoría de las ECV pueden prevenirse actuando sobre los factores de riesgo, como el consumo de tabaco, las dietas malsanas y la obesidad, la inactividad física, la hipertensión arterial, la diabetes o el aumento de los lípidos.

9.4 millones y medio de muertes, es decir, el 16,5% de las muertes anuales, son atribuibles a la hipertensión. Esto incluye el 51% de las muertes por AVC y el 45% de las muertes por cardiopatía coronaria.