Noticias actualizadas las 24 horas Información clave para decidir
26 de abril de 2024
Seguinos en
La vacuna contra el rotavirus salva vidas
24 de enero de 2008
Anualmente, un promedio de 170.000 niños son hospitalizados en América Latina a causa de la diarrea infantil por rotavirus, el principal virus responsable de la diarrea infantil. En nuestro país, casi 20.000 niños son hospitalizados anualmente por esta enfermedad mientras que más de 13.000 niños mueren por año sólo en América Latina. Junto a estas importantes cifras y debido a que se estima que todos los niños presentarán un cuadro de diarrea por rotavirus antes de cumplir los cinco años de edad, la vacunación temprana constituye la principal medida preventiva contra la misma.

Un nuevo estudio, recientemente publicado en la revista The Lancet, evidenció que Rotarix, la vacuna oral de origen humano contra el rotavirus, brinda sostenida y prolongada protección contra los cinco tipos circulantes más comunes de rotavirus. La vacunación es reconocida como la única medida de control con impacto significativo en la prevención de esta enfermedad, que demostró una eficacia del 96 % contra las hospitalizaciones, durante los primeros dos años de vida, incluso contra aquellas cepas del virus cambiante a través del tiempo.

El rotavirus produce infección intestinal, origen de la diarrea grave en los niños, provocando deshidratación que ocasiona una importante morbimortalidad. Un lactante puede presentar de 10 a 20 episodios diarreicos en un día asociados a vómitos explosivos. Debido a que el rotavirus es un virus que se disemina muy fácilmente, independientemente de la condición socioeconómica, cualquier niño puede llegar a contagiarse.

Se estima que en América Latina, dos millones de niños deben realizar consultas médicas a causa de esta enfermedad y más de 13.000 niños mueren por año a causa del rotavirus, enfermedad que lleva a su vez a una gran carga económica, social, emocional y médica.

Dos estudios recientemente desarrollados para América Latina determinaron que el rotavirus genera un importante costo para el sistema de salud de América Latina, mientras que la vacunación contra esta enfermedad es costo-efectiva tanto en la reducción de la incidencia de esta enfermedad como en los costos de salud asociados a la misma. En un análisis desarrollado en América Latina, con un esquema cercano a la vacunación universal en la población analizada, se determinó que la vacunación contra la diarrea infantil por rotavirus, puede reducir el índice de la enfermedad y los gastos médicos atribuidos a la gastroenteritis por rotavirus en alrededor de un 70 %.

Si bien por su contagio vía fecal-oral, el rotavirus puede afectar a los lactantes y niños pequeños sin distinción, su riesgo es mayor en países en vías de desarrollo, debido a su impacto en la mortalidad. Se estima que ocho de cada diez niños que mueren anualmente a nivel mundial a causa de la diarrea infantil por rotavirus, son de países en vías de desarrollo, tales como África, India, Asía Pacífico y Latinoamérica.

A pesar que para la mayoría de los otros agentes causantes de diarrea infantil sirven y se recomiendan adecuadas medidas higiénicas; en el caso de rotavirus, estas medidas no impiden la transmisión del mismo, siendo la vacuna oral contra el rotavirus la mejor medida preventiva contra la causa más frecuente de diarrea infantil

Gracias a que la Organización Mundial de la Salud (OMS) otorgó a la vacuna la categoría de precalificación en febrero del corriente año, Rotarix, la vacuna de GlaxoSmithKline (GSK), recibió el aval para satisfacer las especificaciones de los gobiernos, lo cual permite a las agencias de la ONU, como la Organización Panamericana de la Salud (OPS), UNICEF y otras, realizar compras en grandes cantidades para utilizar la vacuna en programas de vacunación masiva.

La precalificación de la OMS respalda la calidad, la seguridad y la eficacia de la vacuna, siendo la primera oportunidad en que una vacuna contra la gastroenteritis por rotavirus recibe tal autorización. En nuestro país, desde que Rotarix® fue aprobada en marzo del año 2006, cerca de 50.000 bebés ya fueron vacunados.

Desde que fue lanzada en México en el año 2005, la vacuna contra el rotavirus ya ha sido registrada en 75 mercados internacionales y aprobada en 16 países latinoamericanos, incluyendo a la Argentina. A su vez, ya han sido otorgadas un total de 33 licencias alrededor del mundo, convirtiéndose Filipinas y Singapur en los primeros países asiáticos en aprobar a dicha vacuna.

Actualmente, GSK mantiene conversaciones con la Administración Federal de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés), para registrarla en dicho país.

Recientemente, Brasil, Panamá y Venezuela incluyeron la vacuna contra el rotavirus en sus calendarios nacionales de vacunación. Ecuador es el sexto país de América Latina en introducir Rotarix dentro de su programa nacional de vacunación masiva y el primero en hacerlo a través del fondo rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

De administración oral, en sólo dos dosis desde la sexta semana de vida y hasta los seis meses de edad, con un intervalo entre ambas dosis no menor a un mes, la vacuna de origen humano con virus vivos atenuados, es la primera vacuna disponible en el mercado, que ofrece protección del 100% contra los episodios más graves de diarrea infantil por rotavirus, ocasionados por las cepas circulantes más comunes, responsables de ocasionar cuadros de deshidratación, que en algunos casos pueden conllevar a la hospitalización y la muerte.

Según la información surgida de los estudios realizados, la vacuna de GlaxoSmithKline es segura, eficaz y protege contra las cepas de rotavirus prevalentes y puede ser administrada junto con las principales vacunas infantiles, incluyendo la polio oral. El esquema de vacunación permite protección temprana en los niños.

El programa de estudios clínicos de Rotarix desarrollado para demostrar la seguridad y eficacia de la vacuna, es uno de los mayores estudios realizados por GlaxoSmithKline, solamente en América Latina, el cual involucró a más de 70.000 niños.