El Manchester City gana, gusta y golea, convirtiéndose en el equipo que refleja el fútbol total en la tercera década del siglo XXI.

Es que este sábado el extraordinario equipo de Josep Guardiola venció 2 a 0 al Nottingham Forest con goles de alta factura. El primero fue de antología. Fueron 47 pases antes de que Phil Foden sacará un latigazo de zurda para clavarla en el primer palo del arquero norteamericano Matt Turner.

Luego, amplió la distancia, como era de esperarse, a través de una cabezazo demoledor de Erling Haaland. Con el 2-0 a favor, sigue como único líder del campeonato británico con puntaje perfecto.

Pero la cereza del postre fue la jugada del 1 a 0. Tras una recuperación del español Rodri en mitad de cancha, los Ciudadanos movieron el balón a lo ancho y largo del campo de juego, con un panorama extraordinario.

En la enorme jugada intervinieron casi todos los integrantes del equipo, con la curiosa excepción de los dos referentes de ataque, Julián Álvarez y Erling Haaland, que sí sirvieron como elementos distractores para abrir camino a la escalada de Kyle Walker.
Luego de dos minutos de tenencia y 47 toques, Rodri halló una hendija y, con un balón largo, habilitó a Walker, quien anticipó al portugués Nuno Tavares (al rato se iría lesionado para darle lugar al argentino Gonzalo Montiel) y, pese a estar en posición para definir, asistió a un Foden que pisó el área a todo vapor y marcó con un zurdazo bajó al palo izquierdo del arquero. Extraordinario. El fútbol en su máxima expresión.
Julián Álvarez volvió a estar entre los titulares y demostró que tiene un papel clave para el técnico español.
Ya no sólo es el protagonismo que le brinda el cuerpo técnico. Guardiola lo eligió para patear la mayoría de los tiros libres e incluso contra el Nottingham tuvo dos chances: una contenida por Turner y la otra, que tenía destino de ángulo, rebotó en la barrera. El partido todavía no había cumplido el cuarto de hora cuando Haaland cabeceó al gol en otra jugada de antología, aunque más fulminante.
Fue tras un pase profundo de Julián para el brasileño Matheus, que le sirvió el gol al noruego con un centro justo. Partido liquidado.