Por Adrián Taccone, enviado especial de Asteriscos.Tv a Brasil 2014.

Jugar al misterio o en realidad repetir una fórmula que ya dio resultado. Ese sería el pensamiento del entrenador de la Selección Argentina, Alejandro Sabella, de cara al partido ante Suiza, este martes en el Arena Corinthians por los octavos de final del Mundial 204.

Es que cuando todo hacía prever que el delantero Ezequiel Lavezzi iba a ocupar la plaza del lesionado Sergio "Kun" Agüero, en el último entrenamiento en pleno estadio, Sabella dispuso que Maxi Rodríguez sea titular, y el "Pocho" pase a jugar para los suplentes.

Claro que no se ve esto como un mero cambio de nombres, porque la posición ofensiva por naturaleza del Pocho es un poco más arriesgada que la de Maxi, quien en sus inicios se mostró como mediocampista por derecha y en el último tiempo se convirtió en delantero en Newell's Old Boys.

Pero claro, el antecedente de Argentina y Suiza en febrero de 2012, cuando los albicelestes se impusieron por 3 a 1, con tres tantos de Lionel Messi, tiene resonancia en la cabeza de Sabella, dado que en aquél partido dispuso un 4-4-2, con Maxi como titular.

Los octavos de final, como el propio Sabella dijo en la conferencia de prensa, no dejan margen "para el error", ya que cualquier tipo de traspié haría volver a casa antes de tiempo.

En ese sentido, el DT albiceleste parece inclinarse por un juego un poco más especulativo -a priori- colocando a Maxi en lugar de Lavezzi, quien ante Nigeria jugó uno de los partidos más interesantes desde que está en la selección, precisamente tras suplantar al "kun".

Sin embargo, tal vez consciente de que esa variante no fue demasiada practicada y puesta en el campo, el técnico argentino optó por colocar a Lavezzi en lugar del "Kun" y por eso Argentina formará con Romero, Zabaleta, Fernández, Garay, Rojo, Gago, Mascherano, Di María, Messi, Lavezzi y Higuaín.

Lo cierto es que para enfrentar a Suiza, Argentina es claramente la gran favorita, por Messi, por la historia y porque en estos partidos definitorios, Sabella lo señaló "pesa más la mentalidad" que otros argumentos tácticos o técnicos.

El partido comenzará a las 13:00 en el Arena Corinthians, un estadio para más de 60 mil personas, con el arbitaje del sueco Jonas Eriksson.