Por Adrián Taccone, enviado especial de Asteriscos.Tv a Brasil 2014

Con tensión, algo de suerte y con pasajes de buen fútbol, Argentina logró este martes el pasaje a los cuartos de final del Mundial Brasil 2014 al derrotar por 1 a 0 a Suiza, en el tiempo suplementario.

El sábado buscará un lugar entre los cuatro primeros cuando enfrente a Bélgica desde las 13.

El partido disputado en el estadio Arena Corinthians de Sao Paulo se definió con el gol de Angel Di María, en el minuto 118, tras un genial pase de Messi, en un veloz contragolpe que inició Rodrigo Palacio.

Ahora Argentina deberá medirse con el rival del cruce entre Bélgica y Estados Unidos.

La parada de octavos de final ante Suiza, en el Arena Corinthians de Sao Paulo se presentaba compleja y quedó ratificada en el primer tiempo, donde Argentina no encontró los espacios, se sintió por momentos incómoda y el equipo helvético aprovechó las contras.

Con un esquema defensivo y teniendo a Shaqiri como su hombre más inquientante, los suizos intentaron ganar el mediocampo, donde Argentina hizo algo de diferencia, peor le faltó profundidad para llegar con peligro hasta el arco defendido por Benaglio.

Un remate de Lavezzi , un cabezazo de Higuaín alto y una pelota que no pudo conectar Garay en inmejorable posición fueron las acciones más interesantes en ataque que tuvo Argentina en la primera etapa.

Suiza respondió con un disparo de Inler que tapó muy bien Romero con los pies y un mano a mano que desperdició Drmic, porque le erró al toque final, ya que intentó picarla y el arquero argentino ni se molestó en poder atajarla.

En el segundo tiempo reglamentario Argentina siguió siendo el dominador del encuentro, tónica que continuó en el tiempo suplementario, porque los albicelestes no fueron los únicos que se quedaron sin piernas -por eso el reemplazo de Biglia por Gago y de Basanta por Rojo-, sino que también los suizos empezaron a sentir el esfuerzo.

Pero sobre el tiempo final, Palacio recuperó un balón en el mediocampo, cedió para Messi, quien dejó en el camino a Schaer y cedió para Di María, quien entrando por derecha sacó un remate a contrapierna de Benaglio, para desatar la locura albiceleste.

Sin embargo Suiza pagó cara su derrota y fue con todo -en especial con Benaglio- en el área rival y pudo haber igualado con un cabezazo de Dzemaili que dio en el palo y en el rebote el balón dio en la rodilla y se fue cerca del poste derecho de un Romero, estático.

La última jugada fue para el infarto, porque un tiro libre en la puerta del área fue ejecutado por Shaqiri, quien equivocó la manera de definir, ya que intentó un remate alto, y el balón rebotó en la barrera y el partido se fue.