El Ministerio de Salud de Córdoba confirmó que el aumento en la cantidad de casos de Covid-19 que se registró en las últimas semanas es atribuible a la presencia que tiene Ómicron en la provincia, donde alcanzó la circulación comunitaria.

Aunque advirtieron que “aún no es predominante”, la cartera sanitaria dispuso algunos cambios para frenar el avance de esta variante caracterizada en Sudáfrica.

Modificaciones en los protocolos de vigilancia, cambios para los viajeros provenientes del exterior, extensión en los horarios de los centros de testeo y hasta la instauración de espacios para las pruebas diagnósticas durante las fiestas, son algunas de las medidas que implantó el Gobierno cordobés para detener el aumento de casos que se registra en la actualidad.

En este marco, especialistas del Conicet propusieron varias medidas para tratar de frenar los casos y aliviar, a la vez, los centros de testeos que se vieron desbordados en los últimos días. Los investigadores sugirieron que durante 10 días -con las celebraciones por Navidad y Año Nuevo en el medio que van a generar nuevos brotes- se suspenden los eventos masivos en lugares cerrados, ya que está comprobado que es donde hay más trasmisión del virus; en segundo lugar, que se reduzca el aforo en las reuniones al aire libre y además, que se modifique la estrategia a la hora de los testeos.

La mayor parte de los contagios se observan en personas jóvenes, pero las fiestas reúnen a diferentes generaciones y pueden tener un enorme impacto”, dijo Sol Minoldo, socióloga del Conicet y la Universidad Nacional de Córdoba, en relación a las reuniones de Navidad y Año Nuevo.

En declaraciones a La Voz, el especialista sostuvo que hay que minimizar los riesgos de contagios, ya que volver a una cuarentena estricta -que sería lo ideal- es imposible política y socialmente.