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13 de diciembre de 2025
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Ola polar: nevada en algunas zonas del AMBA
22 de junio de 2025
Según informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), una ola polar acechará esta semana a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y sus alrededores, con posibilidad de nevadas en algunos puntos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

De acuerdo con el pronóstico, la caída de nieve -una situación extraordinaria para el AMBA, que registró su última nevada el 9 de julio de 2007- sería durante la madrugada y mañana de este lunes 23 de junio.

Las localidades del conurbano en la que el SMN pronostica térmicas bajo cero y posible caída de nieve son San Miguel, San Andres, Ezeiza, Ciudad Evita, Campo de Mayo, El Palomar, Morón, y Ciudad Jardín, entre los principales.

En el interior de la provincia de Buebnos Aires las localidades donde podría nevar son Sierra de la Ventana; Olavarría, Pigüé, Tornquist, Coronel Pringles, Indio Rico y Laprida. También ciudades de la Costa Atlántica tendrán posibilidades de nevadas.

Las temperaturas mínimas de esta semana, pronosticó el organismo, no superarán los 6 grados y hasta llegarían a 0 grados, mientras que las máximas promediarán los 13 grados, por lo que se recomienda reforzar el abrigo y no estar expuestos de manera innecesaria al aire libre.

Este domingo se esperan lloviznas y lluvias aisladas hasta la tarde, mejorando a la noche con cielo mayormente nublado y vientos del oeste rotando al sudoeste. La temperatura mínima será de 8 grados y la máxima de 15, por lo que será el día más “agradable” de toda la semana.

Para el lunes, en tanto, se prevén chaparrones, con mejoras hacia la tarde y cielo parcialmente nublado, en una jornada en la que podrían registrarse nevadas en varios puntos bonaerenses. Los vientos serán del sudoeste y las marcas térmicas irán de los 3 a los 10 grados.

Para que caiga nieve, hay una combinación de factores que deberían darse este lunes: la entrada de aire frío, para que las temperaturas bajen considerablemente; que se registren precipitaciones frías o muy frías; y una humedad elevada, ya que cuanto más húmeda sea la atmósfera, más probabilidades existen de que se formen nubes que produzcan nieve.