España es el país más afectado por la crisis inmobiliaria y le va a costar muchos años salir. Por eso todos los recursos por vender propiedades se multiplican.
Ahora miles de internautas ofertan sus viviendas por medio de videos en Youtube.
Sólo al teclear �vendo piso� aparecen miles de ofertadas en el mayor portal audiovisual de la Red, pero al menos, en el plano estético, lo que allí se ve es de dudosa ejecución y calidad.
Fluye la imaginación porque la adaptación audiovisual de los clásicos anuncios por palabras domésticos ofrece innumerables versiones y de dispar factura: desde diaporamas al modo de los 'powerpoints' de los años noventa, hasta aquellos con todo tipo de efectos 'amateur', ritmos y músicas, o los inspirados en los programas de televisión y avisos televisivos.
Pese a la ventaja de su popularidad a nivel mundial y su sencillez de acceso, a diferencia de los portales inmobiliarios, Youtube carece de servicios de alertas, galería de imágenes o de búsquedas segmentadas.
Además, en la mayoría de los casos, no es posible conocer su vigencia, si la casa sigue en venta o si las condiciones y precios han variado.
El stock de viviendas nuevas sin vender en España supera largamente el millón.