26 de abril de 2024
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Por Sofía Wachler
Grave crisis de confianza en el sector inmobiliario
30 de agosto de 2009
Como venimos sosteniendo desde este espacio, la incertidumbre, la falta de confianza y de credibilidad son las grandes trabas que estancan a los mercados, en general, pero en el sector inmobiliario y la industria de la construcción, por las características particulares que presentan, resultan demoledoras.
El economista Mario Blejer, director del Banco Hipotecario y de la desarrolladora IRSA, consideró que la Argentina debe generar un "golpe de confianza" para así reconstituir sus fuentes de financiamiento, en la apertura de la Expo Real Estate.
Añadió que “si se logra reconstituir la confianza, y recuperar así las fuentes de financiamiento, se podrá estimular el mercado de los desarrollos y compraventa inmobiliarios”.
Para recobrar la confianza “tenemos que generar políticas consistentes, que se originarán cuando se recupere la credibilidad estadística y se recobre el acceso a los mercados internacionales", expresó.
Eduardo Elsztain, presidente del Banco Hipotecario, señaló que “un individuo no va a un mercado público ni a un mercado de capitales o de blanqueo salvo que crea que va a acceder mejor a un crédito. El crédito lo hacemos todos pero si todo el flujo va hacia el exterior, los bancos no pueden mágicamente retenerlos”.
Agregó que “lo que nos falta entender es que ahorrar en la Argentina, nos posibilita tener acceso a un bien inmobiliario. La confianza es un factor fundamental que se construye en el tiempo”.
Uno de los temas preocupantes que fue señalado reiteradamente como el típico ejemplo de la falta de confianza en el mercado inmobiliario y de seguridad jurídica es el “conflictivo y demagógico anteproyecto de ley de alquileres” de la senadora Teresita Quintela.
“No tiene ni idea de qué es un precio y encima cree que puede derogar la ley de la oferta y la demanda, tampoco entiende nada de contratos y menos de locaciones”, dijeron en la Expo.
Otro concepto que se mencionó una y otra vez en las disertaciones es que “el mercado inmobiliario está más chico, tanto del lado de la demanda como de la oferta”.
Los inversores miran dónde están las oportunidades y los números no son tan obvios ni evidentes aún para los profesionales con gran expertise.
Este es un tiempo de observación, de analizar nuevas oportunidades y estrategias.
“Para el sector inmobiliario esta crisis no es como la del 2001 ni como las del tequila, las crisis asiáticas”, conclusión de amplio consenso entre los disertantes.
Básicamente porque en la actual hay una sobreoferta de productos inmobiliarios que no había sucedido en las otras, ni en la del tequila (1995), ni en la de las crisis asiáticas (1998), ni en la del 2001 .
Lo que existe, en realidad, es un cambio de ciclo en los negocios, en general y específicamente en el mercado inmobiliario se está en el punto de inflexión.
Otra de las conclusiones que en realidad, se consideró un objetivo prioritario para poner en práctica cuánto antes es lograr el financiamiento a la demanda y no a la oferta, como hasta ahora.
También hubo un pedido expreso de todos los disertantes en el sentido que “esta crisis brinda la mejor oportunidad para incorporar a los sectores medios, la clase media en los proyectos inmobiliarios y no solamente construir para el segmento ABC 1”.
Los sectores medios son los más postergados en temas de vivienda desde hace muchísimos años, a quienes se les dificulta cada vez más el acceso a la primera vivienda, precisamente por la falta de financiamiento a la que pueden acceder.
En los dos días que duró la Expo, el tema infaltable de los precios estuvo en el tapete todo el tiempo. Consenso general: “No van a bajar porque si bien hay sobreoferta, existe una gran demanda insatisfecha y la gente que no tiene apremios económicos, no se va a desprender de su casa o departamento, es lo último que haría”.
El economista Mario Blejer, director del Banco Hipotecario y de la desarrolladora IRSA, consideró que la Argentina debe generar un "golpe de confianza" para así reconstituir sus fuentes de financiamiento, en la apertura de la Expo Real Estate.
Añadió que “si se logra reconstituir la confianza, y recuperar así las fuentes de financiamiento, se podrá estimular el mercado de los desarrollos y compraventa inmobiliarios”.
Para recobrar la confianza “tenemos que generar políticas consistentes, que se originarán cuando se recupere la credibilidad estadística y se recobre el acceso a los mercados internacionales", expresó.
Eduardo Elsztain, presidente del Banco Hipotecario, señaló que “un individuo no va a un mercado público ni a un mercado de capitales o de blanqueo salvo que crea que va a acceder mejor a un crédito. El crédito lo hacemos todos pero si todo el flujo va hacia el exterior, los bancos no pueden mágicamente retenerlos”.
Agregó que “lo que nos falta entender es que ahorrar en la Argentina, nos posibilita tener acceso a un bien inmobiliario. La confianza es un factor fundamental que se construye en el tiempo”.
Uno de los temas preocupantes que fue señalado reiteradamente como el típico ejemplo de la falta de confianza en el mercado inmobiliario y de seguridad jurídica es el “conflictivo y demagógico anteproyecto de ley de alquileres” de la senadora Teresita Quintela.
“No tiene ni idea de qué es un precio y encima cree que puede derogar la ley de la oferta y la demanda, tampoco entiende nada de contratos y menos de locaciones”, dijeron en la Expo.
Otro concepto que se mencionó una y otra vez en las disertaciones es que “el mercado inmobiliario está más chico, tanto del lado de la demanda como de la oferta”.
Los inversores miran dónde están las oportunidades y los números no son tan obvios ni evidentes aún para los profesionales con gran expertise.
Este es un tiempo de observación, de analizar nuevas oportunidades y estrategias.
“Para el sector inmobiliario esta crisis no es como la del 2001 ni como las del tequila, las crisis asiáticas”, conclusión de amplio consenso entre los disertantes.
Básicamente porque en la actual hay una sobreoferta de productos inmobiliarios que no había sucedido en las otras, ni en la del tequila (1995), ni en la de las crisis asiáticas (1998), ni en la del 2001 .
Lo que existe, en realidad, es un cambio de ciclo en los negocios, en general y específicamente en el mercado inmobiliario se está en el punto de inflexión.
Otra de las conclusiones que en realidad, se consideró un objetivo prioritario para poner en práctica cuánto antes es lograr el financiamiento a la demanda y no a la oferta, como hasta ahora.
También hubo un pedido expreso de todos los disertantes en el sentido que “esta crisis brinda la mejor oportunidad para incorporar a los sectores medios, la clase media en los proyectos inmobiliarios y no solamente construir para el segmento ABC 1”.
Los sectores medios son los más postergados en temas de vivienda desde hace muchísimos años, a quienes se les dificulta cada vez más el acceso a la primera vivienda, precisamente por la falta de financiamiento a la que pueden acceder.
En los dos días que duró la Expo, el tema infaltable de los precios estuvo en el tapete todo el tiempo. Consenso general: “No van a bajar porque si bien hay sobreoferta, existe una gran demanda insatisfecha y la gente que no tiene apremios económicos, no se va a desprender de su casa o departamento, es lo último que haría”.