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19 de abril de 2024
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Por Sofía Wachler
¿Cómo vender sin créditos hipotecarios?
23 de noviembre de 2010
En 1997 el mercado de créditos hipotecarios en el PBI argentino era muy bajo, de tan sólo el 3 % y llegó a 4,1 % hasta pocos meses antes de la crisis de diciembre de 2001. Actualmente, es casi nulo.

En los últimos años ha ido descendiendo hasta ubicarse en 0,7 por ciento, el porcentaje más bajo de las últimas décadas. En Brasil la misma comparación es de 3,6 por ciento; en Chile, 7 por ciento; en España, 7,6 por ciento, y en Estados Unidos, 25,6 por ciento, pese a que descendió luego de la crisis subprime que estalló en octubre de 2008.

En relación con su producto bruto interno (PBI), este tipo de préstamos representan en Brasil 5 veces más que lo que pesan en la Argentina. Con Chile, la relación es 10 a 1. Y la comparación con países desarrollados es directamente abrumadora.

Los datos surgen de un estudio de la consultora abeceb.com, que recordó que hasta mediados de la década de 2000 el financiamiento para la compra de viviendas en la Argentina y en Brasil se movía en un nivel parecido, entre el 1 y el 1,5 por ciento del PBI.

"Las razones principales del bajo desarrollo del mercado de créditos de largo plazo en la Argentina obedecen a la alta inflación y el cortoplacismo de los depósitos", explica Dante Sica, de la consultora abeceb.com

Desde entonces, no paró de descender. En una serie que abeceb.com elaboró desde enero de 1994, nunca el índice había caído tan bajo como ocurre en lo que va de 2010, cuando ese indicador no se mueve del 0,7 por ciento del producto.

"La configuración macroeconómica de antes de 2001, con tipo de cambio fijo y economía dolarizada, hacía que el sector privado bancario pudiera financiar a largo plazo y si bien luego del 2001, la economía se recuperó, pero no así el crédito de largo plazo en la Argentina", señaló Ramiro Lucas, autor del informe mencionado.

El gran dilema es cómo continuará su actividad el mercado inmobiliario en este contexto sin créditos hipotecarios, al menos en el mediano plazo.

La gran asignatura pendiente que es el hábitat para sectores medios en una gran mayoría para la primera vivienda, parece alejarse cada día más, pese a que existen propuestas interesantes del sector privado en tal sentido.