26 de abril de 2024
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Por Sofía Wachler
"(NO) Somos el gobierno que más construyó"
13 de junio de 2011
“Tenemos una política habitacional que nos convirtió en el gobierno que más viviendas construyó en el país, desde el 2003 se edificaron “ochocientas mil casas”, aseguró la presidenta Cristina Fernández.
Sin embargo, la realidad es bastante diferente: según el Censo Nacional de 2001 había más de 3 millones de personas con problemas de habitabilidad, pero el Estado entre 2003 a 2010 solamente construyó 315.000 viviendas, lo que cubre tan sólo el 24% de la demanda creada entre 2003 y 2010, y ese déficit se elevó a 3,8 millones.
¿Dónde están las 500.000 viviendas restantes? Demasiados interrogantes mientras se siguen destapando hechos de corrupción, con un tema tan sensible para la gente más necesitada.
Miguel Pato, de Ernest& Young Real Estate Group, consideró que “para solucionar efectivamente el tema del déficit habitacional habría que realizar un enfoque sistémico con participación subsidiaria del Estado, con un subsidio explicito a la demanda sobre bases progresivas”.
Es necesario contar con “un padrón único de solicitantes de soluciones, además de
criterios uniformes y transparentes de asignación de subsidios”, añadió.
Pero enfatizó que “cuando tengamos política de vivienda, el déficit cuantitativo en el sector bajo y cualitativo en el medio serán resueltos. Ese día, los oportunistas que hacen política con la vivienda de los necesitados se habrán quedado sin negocio”.
Pato se preguntó: ¿cómo llegamos a esto cuando tuvimos entidades pioneras en la Argentina como: Sociedades Territoriales Alemanas, Crédit Foncier, Banco Hipotecario de la Provincia de BA y la Sección de Préstamos Hipotecarios del Banco Nacional (1884).
“También lo fuimos en una legislación pionera como con leyes como la 1.804/1886 que creó el Banco Hipotecario Nacional (BHN); Ley 9.677/1895 Comisión Nacional de Casas Baratas, Ley 21.581/77 que creó el FONAVI; Ley 23.966/1991, en su Artículo 18 Fondo Nacional . de la Vivienda; Ley 24.374/94 conocida como la Ley Pierri de Regularización Dominial ; Ley 24.464/1995 Sistema Federal de la Vivienda y la Ley 24.865/1997 que privatizó el BHN”.
¿Qué nos pasó? “La vivienda se convirtió en la necesidad de muchos y el negocio de pocos”, dijo el especialista.
Señaló que “en tiempos de elecciones, la vivienda se convirtió en el gran negocio de controlar voluntades y administrar la ilusión, un negocio de soluciones que “pocos” pueden dar, el negocio de los empresarios sin riesgo y el negocio del sistema alternativo en tierra, materiales, servicios y financiación”.
“El problema se resuelve con políticas de viviendas, no con planes”. No se resuelve con programas, pero para ello es necesario tener una visión que abarque todos los elementos del problema y de la solución; saber qué hacer y cómo llevarlo a la práctica y gestionar.
Por el contrario y los hechos hablan por sí solos, “Hoy el dinero se aplica en malos negocios y se implementa en malos vehículos”, finalizó Pato.
Sin embargo, la realidad es bastante diferente: según el Censo Nacional de 2001 había más de 3 millones de personas con problemas de habitabilidad, pero el Estado entre 2003 a 2010 solamente construyó 315.000 viviendas, lo que cubre tan sólo el 24% de la demanda creada entre 2003 y 2010, y ese déficit se elevó a 3,8 millones.
¿Dónde están las 500.000 viviendas restantes? Demasiados interrogantes mientras se siguen destapando hechos de corrupción, con un tema tan sensible para la gente más necesitada.
Miguel Pato, de Ernest& Young Real Estate Group, consideró que “para solucionar efectivamente el tema del déficit habitacional habría que realizar un enfoque sistémico con participación subsidiaria del Estado, con un subsidio explicito a la demanda sobre bases progresivas”.
Es necesario contar con “un padrón único de solicitantes de soluciones, además de
criterios uniformes y transparentes de asignación de subsidios”, añadió.
Pero enfatizó que “cuando tengamos política de vivienda, el déficit cuantitativo en el sector bajo y cualitativo en el medio serán resueltos. Ese día, los oportunistas que hacen política con la vivienda de los necesitados se habrán quedado sin negocio”.
Pato se preguntó: ¿cómo llegamos a esto cuando tuvimos entidades pioneras en la Argentina como: Sociedades Territoriales Alemanas, Crédit Foncier, Banco Hipotecario de la Provincia de BA y la Sección de Préstamos Hipotecarios del Banco Nacional (1884).
“También lo fuimos en una legislación pionera como con leyes como la 1.804/1886 que creó el Banco Hipotecario Nacional (BHN); Ley 9.677/1895 Comisión Nacional de Casas Baratas, Ley 21.581/77 que creó el FONAVI; Ley 23.966/1991, en su Artículo 18 Fondo Nacional . de la Vivienda; Ley 24.374/94 conocida como la Ley Pierri de Regularización Dominial ; Ley 24.464/1995 Sistema Federal de la Vivienda y la Ley 24.865/1997 que privatizó el BHN”.
¿Qué nos pasó? “La vivienda se convirtió en la necesidad de muchos y el negocio de pocos”, dijo el especialista.
Señaló que “en tiempos de elecciones, la vivienda se convirtió en el gran negocio de controlar voluntades y administrar la ilusión, un negocio de soluciones que “pocos” pueden dar, el negocio de los empresarios sin riesgo y el negocio del sistema alternativo en tierra, materiales, servicios y financiación”.
“El problema se resuelve con políticas de viviendas, no con planes”. No se resuelve con programas, pero para ello es necesario tener una visión que abarque todos los elementos del problema y de la solución; saber qué hacer y cómo llevarlo a la práctica y gestionar.
Por el contrario y los hechos hablan por sí solos, “Hoy el dinero se aplica en malos negocios y se implementa en malos vehículos”, finalizó Pato.