Los riesgos de la gripe en medio de la ola de frío - Asteriscos.Tv
Noticias actualizadas las 24 horas Información clave para decidir
25 de abril de 2024
Seguinos en
Los riesgos de la gripe en medio de la ola de frío
1 de junio de 2007
Con la llegada de los primeros fríos, los cuadros gripales están siendo los grandes protagonistas de las calles de Buenos Aires. La fiebre alta, el decaimiento intenso, el dolor de cabeza, las molestias musculares y los síntomas respiratorios (tos, dolor de garganta, congestión, etc.) son los principales indicadores de la aparición de un estado gripal que muchas veces es desatendido por quien lo padece y que puede producir serias complicaciones.

Daniel Stamboulian, presidente de la Fundación Centro de Estudios Infectológicos (FUNCEI) aseguró que “ante la aparición de estos signos, es importante realizar una consulta médica a fin de instrumentar el tratamiento necesario para evitar que el cuadro progrese. A su vez, se previene el contagio, que puede darse a partir de la inhalación de las gotitas de saliva que expelen las personas infectadas cuando estornudan, tosen o hablan, o bien al estar en contacto con superficies infectadas”.

Si bien afortunadamente no todos los “estados gripales” son causados por el virus de la gripe (o “influenza”), teniendo en cuenta que las bajas temperaturas y la convivencia en lugares cerrados favorecen su desarrollo y contagio, los especialistas destacan la importancia de vacunarse “antes de que llegue el invierno”.

En la Argentina ya está circulando el virus de la gripe. Se han registrado, tanto en la ciudad de Buenos Aires como en el interior del país, casos de influenza tipo A subtipo H3, correspondientes a la cepa incluida en la vacuna de este año. También hubo algunos casos de influenza tipo B, que se presentó con un cuadro más leve.

Como principal medida de prevención para combatir la gripe, el Ministerio de Salud de la Nación compra, cada año, una gran cantidad de vacunas antigripales. Pero ya sea como consecuencia de la falta de información, o por falencias en la prescripción médica, sólo una de cada tres personas incluidas en los grupos de riesgo la reciben. Con la vacunación es posible prevenir la aparición de cuadros gripales, que no sólo generan molestias y ausentismo escolar y laboral, sino que además pueden contribuir a la descompensación de condiciones crónicas preexistentes y producir seria complicaciones.

A través de la aplicación de la vacuna antigripal se puede prevenir hasta 90% de los casos de gripe, y entre 30 y 70% de las internaciones por neumonía y muertes en ancianos.

Eduardo López, jefe a cargo del Departamento de Medicina del Hospital de Niños
“Ricardo Gutiérrez” y asesor médico de la Fundación Argentina de Infectología Pediátrica, indicó que “los niños son los primeros que deben vacunarse debido, fundamentalmente, a que constituyen una importante fuente de contagio, ya que también eliminan virus por periodos más prolongado”.

“Al estar en la escuela con otros chicos, el virus comienza a circular y cuando lo contraen, luego lo llevan a sus casas con un alto riesgo de contagio para sus padres, abuelos y hermanos. No obstante la recomendación de vacunación es enfática cuando se trata de chiquitos con factores de riesgo, o enfermedades crónicas como asmáticos, cardiópatas, otras enfermedades pulmonares, diabetes, enfermedad renal crónica, etc. quedando esta consideración siempre bajo la órbita del pediatra”, indicó López.

La gripe suele empezar en forma brusca, con características como:
- Fiebre alta
- Dolor de cabeza
- Decaimiento intenso
- Tos seca
- Dolores musculares y articulares
- Anorexia

Sin embargo, los grupos de riesgo no sólo incluyen a los niños en edad escolar, sino también a sus familiares cercanos y a todas aquellas personas mayores de 65 años, así como también a quienes padezcan enfermedades crónicas, cardiovasculares, renales o pulmonares, ya sea adultos, jóvenes o chicos.

Las mujeres embarazadas, todo el personal de salud, los pacientes con HIV y quienes se desempeñan en lugares de trabajo de atención al público también deberían recibir la vacuna. Siguiendo este criterio se calcula que, en la Argentina, deberían vacunarse alrededor de 12 millones las personas. De lo cuales sólo 30% lo hace.

No obstante, con el objetivo de llegar a una población cada vez más amplia, las autoridades sanitarias de diversos países recomiendan extender la indicación de la vacuna, a todos los niños menores de cinco años. Con respecto a los adultos, la edad indicada para la inmunización bajó de 65 años, a 50. No obstante e independientemente de su edad cualquier persona está en condiciones de recibir la vacuna antigripal previa consulta a su médico (a partir de los 6 meses de edad).

En Argentina, la indicación rige para los niños mayores de seis meses que padezcan enfermedades crónicas, o se encuentren en riesgo de sufrir infecciones respiratorias agudas o serias complicaciones como consecuencia de la gripe.

Recomendaciones Generales de prevención:
Lavarse las manos con frecuencia y limpiar las superficies que puedan haber estado en contacto con gérmenes. Evitar acercarse a personas que estén atravesando un cuadro gripal. Cubrirse la boca o la nariz al toser o estornudar. Acudir al centro de salud más cercano o consultar al médico especialmente en el caso de niños y ancianos con síntomas de gripe. Hacer reposo, pues es importante no concurrir al trabajo, la escuela u otros lugares para evitar el contagio a otras personas y asegurar una total recuperación.

La gripe y el resfrío son cuadros que suelen confundirse, pero mientras que el resfrío es pasajero y no tiene mayores consecuencias para la salud, la gripe puede desencadenar o descompensar otras graves afecciones y traer serias complicaciones:
Síntomas Resfrío Gripe
Fiebre Pocas veces Alta: 39-40ºC
Dolor de cabeza Raro Fuerte
Dolores musculares y generalizados
Leves Sí, de moderados a intensos
Debilidad y fatiga/Decaimiento Leves Importantes (de 2 a 3 semanas)
Postración Nunca Precoz y marcada
Congestión y catarro nasal/Estornudos
Común Algunas veces
Dolor de garganta Común Algunas veces
Tos Seca, luego catarral
Común: seca y moderada. Puede tornarse intensa
Malestar respiratorio Raro Moderado (puede tornarse intenso cuando la gripe se complica)